lunes, 17 de septiembre de 2007

Natural

Natural es, según el Diccionario del Español Actual, (de M.Seco y otros), aquello que es propio de la naturaleza; y también una conducta espontánea o instintiva, que se muestra sin afectación. Por analogía se entiende algo esperable, las consecuencias lógicas de algún evento.

Todos comprendemos de que se habla cuando se oye "¡es natural!", sin embargo precisarlo, como suele suceder, resulta bastante más complicado.

Si se entiende que por tal aquello impreso genéticamente en el individuo, todo lo que aprende, en tanto novedad no incluída en nuestra biología... no forma parte de "lo natural".

Ahora claro que si hacemos un esfuerzo imaginativo y extendemos el concepto a todo aquello que es producido o generado por un organismo, en su actividad de supervivencia, entonces los plásticos, las máquinas y todo lo que creado por el ser humano son perfectamente naturales.

Si se opone, por ejemplo, un vegetal transgénico a otro natural ¿dónde colocar casi todos aquellos que usamos y comemos? ya que resultan de una manipulación de milenios realizada por la especie humana y que sin ella no habría tenido lugar. Ni el trigo, ni el algodón, ni el arroz, ni el maíz ni cualquier otra planta de las que nos resultan úitiles habrían tenido alguna posibilidad de sobrevivir, en las condiciones en que existen actualmente, sin intervención humana.

La distinción es útil en tanto se la piensa para separar de un lado los árboles, las plantas, los pájaros y las hormigas; y del otro las ciudades, el humo contaminante de los coches y motos, el ruido y las chabolas de los barrios marginales. Pero vuelve a diluirse la frontera si se piensa que los volcanes lanzan millones de toneladas de contaminantes capaces de extinguir la vida en kilómetros a la redonda, o que el ruido que produce un terremoto no sólo no es agradable sino que espanta a todo bicho viviente; y nadie duda que son perfectamente "naturales".

Para colmo, de confusión, algunas personas consideran que es natural escribir con pluma y tintero y no lo es escribir en el ordenador. Esta distinción no es otra cosa que una ilusión, ya que en su momento estos medios ahora arcaicos fueron una tecnología puntera, en relación con medios más primitivos. Lo mismo podría decirse de los tratamientos con sábanas mojadas (para bajar la fiebre), las tisanas o cualquier otra técnica terapéutica de la "medicina natural". Todo fue "tecnología punta" en su momento, y al cabo de unos años, o siglos, de tan antiguo ya parece que ha crecido espontáneamente en algún charco humeante del paleolítico.

¿Significa todo lo anterior que la distinción es irrelevante, o propia de charlatanes?

No, no lo creo. Hay cosas que, intuitivamente, nos parecen más naturales que otras. Cosas, procesos, hábitos, reacciones: aquello que no es forzado, que sufre pocas transformaciones entre su origen y el producto final... En fin, todo aquello que no es producto de la violencia, que alarga la vida, que le da calidad, que invita a la creatividad.

Desde este punto de vista la mayoría de nuestras diversiones, puro alcohol y ruido, son muy poco naturales. Nuestras apetencias siempre insatisfechas son nada naturales. Nuestra educación es más artificial que el plástico y más ajena a tales propósitos que una instalación petrolera construída dentro del territorio virgen de la Antártida.

Es posible que la búsqueda de "lo natural" sea en forma críptica, cifrada y comprimida, una búsqueda de algo valioso que nada tiene que ver con la naturaleza que percibimos. A lo mejor buscamos no la naturaleza sino la "humanidad"; algo que por difícil y rara resulta un producto más intuido que conocido.

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